Entrando en crisis psicótica en tres... dos... uno...

... Bienvenido a Crisis Psicótica. Población A MÍ QUÉ COÑO ME CUENTAS, DÉJAME EN PAZ, TE ODIO!!!!

(para los que acaben de sintocinarnos, un pequeño resumen de la historia)

Hace dos o tres meses me mandaron el gran trabajo tocho final de Lenguaje Publicitario, mi vieja archienemiga, la asignatura que puede hacer que jamás acabe la carrera en mi vida. El trabajo era bastante extenso: primero había que escoger una campaña actual, que estuviese en vigor en el momento de la elección de la misma, y analizarla por encima para determinar el eje semántico de la campaña (la idea central, pa que nos entendamos). Una vez hecho eso, se le daba la vuelta al eje semántico de la campaña y se elaboraba una campaña totalmente nueva, que debía ser analizada de manera exhaustiva

Un trabajo coñazo para hacerlo yo solo, pero era mi única asignatura y no conocía a nadie de la clase. Así que, valientemente, me enfrenté yo solito a ese trabajo.

Escogí dos campañas y luego descarté una. Pero para ello tenía que conseguir la cuña radiofónica de la otra, que era lo único que me faltaba. Así pues, perdí medio día pegado a la radio, luego una mañana entera durmiéndome sobre el teclado, pero al tercer día lo conseguí: recién levantado puse la radio y emitieron la cuña. La grabé de inmediato y le anuncié a la profesora que la campaña escogida sería "No podemos abrocharnos el cinturón por ti", de la DGT.

Desde entonces he estado día tras día (con días de por medio en los que apenas he hecho nada, vale) liado con dicho trabajo, hasta que finalmente anteayer, tras una sesión intensiva (un apartado del trabajo, un capítulo de Padre de Familia, un apartado del trabajo, un capítulo de Padre de Familia, y así para no saturarme), conseguí terminar el trabajo.

¡Y qué trabajo! Setenta y nueve folios yo solito, una campaña publicitaria muy poco eficaz pero diametralmente opuesta a la original (que era lo que se me pedía para el trabajo, a fin de cuentas), fuentes documentales, datos estadísticos... Todo perfectamente justificado. La mar de completito, vaya.

Ni punto de comparación con la mierda del año pasado. Ni un solo anuncio original, todos transcritos de memoria. Toda la materia teórica de la asignatura mal entendida, con lo cual el trabajo estaba fundamentado en conocimientos equivocados. En total pude sacar unos veintipocos folios, puede que treinta y algo. Lamentable, deplorable.

Este es el último año que puedo hacer la asignatura. Y si suspendo el trabajo dará igual lo que tenga en el examen, la asignatura estará suspensa y no podré terminar la carrera. Así que me he esforzado hasta cotas de esfuerzo que yo no sabía que me podía esforzar (lo sé, en esta frase no me he esforzado demasiado). Ya sólo me falta recopilar los anuncios de televisión, radio y prensa que he analizado en un cd para añadirlo al trabajito de los cojones, que entregaré el próximo miércoles cuando me examine.





Grande sería mi sorpresa al descubrir que se me ha perdido la puta cuña radiofónica.

Con lo cual mi trabajo está incompleto, lo que hará que me baje la nota, lo que si por alguna razón resultare que mi trabajo no está tan bien como yo creía podría suponer el suspenso, lo que podría llevarme a no poder terminar la carrera, lo que significaría que he tirado siete años de mi vida a la basura, lo que me convertirá en un desgraciado, POR UN PUTO ARCHIVO DE AUDIO QUE TUVE QUE PEGARME DOS MADRUGONES Y UNA MAÑANA PERDIDA DE MÁS PARA PODER GRABAR!!!!!!!

Si alguien me necesita estaré pegándome un tiro. Por si salpico, lo que me tengáis que decir desde detrás del cristal.